La semana pasada un jovencito tenismesista con el que trabajo de tan solo 13 años me dejó pensando en cuanto al poder de la comunicación en deportes como el tenis, el tenis de mesa, golf, y otros deportes de competencia individual: ¿qué tanto pesa la comunicación en una competencia? Más específicamente, ¿qué tanto peso tiene la comunicación de uno sobre un rival?
Todo partió cuando con este joven e inteligente deportista hablamos del caso Nadal (sepan entender, lo hablamos el mismo día que Rafael Nadal ganaba nuevamente Roland Garros). La realidad indica es que Nadal es un excelente tenista, el mejor de la historia de España y de polvo de ladrillo. Talentoso, tácticamente muy inteligente, una capacidad física extraordinaria y, desde mi punto de vista, el mejor a nivel psicológico (es increíble pensar que reuniendo todas estas cualidades, ¡aún así no es el número uno!)
Pero qué define que desde mi perspectiva, Nadal sea el que mejor maneja la mente en las competencias. Principalmente en cuanto a dos aspectos:
- Pensamientos y Concentración
- Comunicación
En cuanto a los pensamientos y comunicación, la explicación es sencilla, véanlo ganar un punto. No importa cual. El entusiasmo, energía y optimismo es siempre igual, así esté a pocos puntos de perder, recién iniciando el partido y ganando un partido cómodamente. Nadal está siempre “en el aquí y ahora”, es consciente que siempre dependerá de él ya que el factor tiempo en el tenis no está presente y puede revertir cualquier situación por más adversa que pudiese ser, si está concentrado en lo que debe hacer y con la activación adecuada. Si gana un punto, aún perdiendo, se nota que claramente por la cabeza de este deportista pasa un pensamiento de optimismo, alegría y seguridad que siguiendo ese camino, va a reponerse. Mientras que, aún ganando holgadamente, no se relaja. Juega intensamente cada punto, por más insignificante que pudiera ser. Sabe lo que tiene que hacer a todo momento, sus pensamientos son sus aliados.
En cuanto a la comunicación mi respuesta es la misma: véanlo ganar un punto. No quiero estar en el lugar de un rival cuando acaba de perder un punto durísimo contra Nadal… ese festejo, esa imagen amenazaste, esa mirada sólida confianza … hay que estar muy bien preparado mentalmente para que frente a una situación así no pase por la cabeza la idea de “Es imposible ganarle”.
Comunicación no sólo es aquello lo que se dice con palabras (comunicación verbal), sino que también incluye la imagen corporal, proximidad física y la entonación y énfasis que uno le aplica a las palabras (comunicación no verbal) y todo esto último es más poderoso para comunicar que las palabras. Una imagen dice más que mil palabras, y la imagen de Nadal en la cancha dice mucho.
Por eso “ganar el partido mental” implica mucho más que ser un mero optimista. Implica mantener la mente en su lugar, reforzarse y festejar los logros, brindarse autoinstrucciones en los momentos difíciles para saber que hacer y siempre, siempre, siempre, brindar una imagen de fortaleza, estando en sintonía con la mente.
